El FC Barcelona asegura el futuro de su mayor talento. Lamine seguirá de azulgrana hasta 2031 con una cláusula intocable.
Lamine y su contrato: sin sorpresas… salvo en los detalles
La entidad azulgrana anunció la renovación de Lamine con un escueto comunicado sin entrar en cifras. Sin embargo, fuentes cercanas confirman que la cláusula de rescisión se mantiene en los 1.000 millones de euros, como ya figuraba en su anterior contrato. No se trata de un nuevo documento desde cero, sino de una readecuación con mejoras salariales tras el espectacular rendimiento del jugador.
Este blindaje reafirma la apuesta del club por quien ya es considerado uno de los pilares del presente y del futuro inmediato y a largo plazo. Lamine ha sido diferencial y, a sus 17 años, se ha ganado el respeto del vestuario, del staff técnico y de todo el entorno del mundo del fútbol.
Silencio mediático… por ahora
Curiosamente, el Barça no ha distribuido imágenes del acto protocolario ni ha generado contenido para redes sociales, algo poco habitual en renovaciones de esta magnitud. ¿El motivo? Fue el propio jugador quien pidió discreción, ya que su abuela paterna no pudo asistir a la firma.
Eso sí, el club ya trabaja en una celebración en condiciones para el próximo 13 de julio, día en que Lamine cumplirá la mayoría de edad y antes de que el equipo ponga rumbo a la gira asiática por Japón y Corea del Sur.
El nuevo ’10’ del Barça
Aunque no hay confirmación oficial, el rumor que crece entre la afición y el entorno azulgrana es claro: Lamine podría heredar el dorsal ’10’ a partir de la próxima temporada debido a la más que segura marcha de Ansu Fati, actual portador de ese número, al AS Mónaco.
El peso simbólico de ese número, que fue de Leo Messi durante más de una década, no es menor. A nivel de marketing, sería una jugada potente. A nivel emocional, una responsabilidad gigantesca. Veremos si el club y el jugador deciden mover ficha, que será lo más probable.
Un salario de estrella
Como viene siendo costumbre, el Barça ha optado por no comunicar las cifras salariales, pero fuentes cercanas estiman que Lamine cobrará en torno a los ocho millones de euros netos fijos por temporada. A esto se suman múltiples bonus por rendimiento, títulos y galardones individuales.
Uno de los incentivos más llamativos es un bonus especial si gana el Balón de Oro, un premio que no parece tan lejano vista su evolución meteórica. En total, si cumple todos los objetivos establecidos, podría alcanzar los 15 o incluso 20 millones netos anuales, convirtiéndose así en el jugador mejor pagado de la plantilla.
Una renovación que da oxígeno al proyecto deportivo
En un mercado de fichajes que no se espera especialmente agitado por las limitaciones económicas, la continuidad de Lamine Yamal es la mejor noticia posible para el barcelonismo. Atar al posiblemente mejor jugador del mundo actualmente es, hoy por hoy, el movimiento más estratégico que puede realizar el club.
Con este paso, el Barça no solo se asegura un activo deportivo de primer nivel, sino también un líder mediático y comercial capaz de atraer marcas, aficionados y esperanza. Porque en medio de la reconstrucción, tener a Lamine Yamal como buque insignia es una victoria rotunda.
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