Tras tres prórrogas, el Barça se lleva un duelo antológico y para la historia ante un gran Baskonia
El Palau Blaugrana fue testigo de una noche de baloncesto simplemente histórica, en un partido loco que hizo vibrar a todos los aficionados culés. El Barça protagonizó una gran remontada frente a un Baskonia que dominó buena parte del encuentro y que tuvo en Marcus Howard a su estrella, con 33 puntos, mostrando su clase y puntería desde el perímetro. Sin embargo, la actuación de Howard quedó eclipsada por el espectáculo de Kevin Punter, que alcanzó un nivel “Michael Jordaniano”, convirtiendo cada balón en una oportunidad de heroísmo y dejando momentos para el recuerdo en cada ataque.
Con alternativas constantes en el marcador, tensión hasta el último segundo y hasta tres prórrogas, el partido se convirtió en un auténtico carrusel de emociones, triples decisivos y canastas imposibles. El Barça, impulsado por su intensidad defensiva, su garra y la energía de un Palau entregado, logró imponerse finalmente 134-124 en un choque que parecía no tener fin y que demostró que el carácter de este equipo va mucho más allá de cualquier adversidad. Una noche histórica, llena de épica, pasión y baloncesto en estado puro.

Primera parte
El partido no empezó de la mejor manera para el Barça, con un Baskonia muy incisivo desde el primer minuto y anotando canastas fáciles. Xavi Pascual, descontento con como había salido su equipo, pidió un tiempo muerto a los dos minutos para dar un toque de atención a sus jugadores. Un Punter espectacular sostuvo al equipo en el marcador con baskets importantes. A mitad de cuarto el Barça perdía de seis (10-16).
Unos primeros diez minutos flojos de los azulgranas, que no demostraron la solidez defensiva vista en partidos anteriores. Los hombres de Pascual no estaban siendo capaces de frenar la ofensiva vasca y llegaron a encajar un parcial de 0-7. Pese al esfuerzo final de los locales, el cuarto acabó con un abultado 17-26, con una ventaja de nueve puntos para el Baskonia.
El Barça afrontó el segundo cuarto con la necesidad de enderezar el partido y recortar distancias en el electrónico. De lo más positivo del encuentro hasta el momento fueron los buenos minutos del joven Sayon Keita, mostrándose contundente en las inmediaciones del aro. En el lado opuesto, el visitante Marcus Howard seguía castigando al conjunto azulgrana con su acierto desde el perímetro.
A unos azulgranas erráticos e irregulares les siguió costando mucho hacer frente a un conjunto vasco muy bien organizado y, sobre todo, muy acertado de cara al aro. En los minutos finales del cuarto, el Barça volvió a mostrar la garra defensiva que tanto estaba caracterizando al equipo en los últimos partidos y, gracias a ello, cerró el periodo “solo” seis puntos por debajo (47-53).
Segunda parte
El Barça arrancó la segunda mitad con un objetivo muy claro: remontar el partido para mantener la buena racha de victorias. Sin embargo, el inicio del cuarto volvió a ser complicado y el conjunto azulgrana sufrió de nuevo el impresionante acierto del rival, con prácticamente un 70% de acierto en el triple y en el tiro de dos, hasta el momento.
Una vez más, en los minutos finales, los de Xavi Pascual mostraron su versión más reconocible, intensos en defensa, atentos al rebote y con mayor claridad en ataque, todo ello impulsado por un Palau entregado, como siempre. Sin embargo, la reacción no fue suficiente y los culés cerraron el cuarto cinco puntos por debajo, con los deberes aún por hacer en los últimos diez minutos de partido (70-75)
Con Clyburn fuera de combate por lesión, el Barça necesitaba mostrar su mejor versión para darle la vuelta al marcador. Y así lo hizo en los primeros minutos del último cuarto, muy acertados, y un gran triple de Norris devolvió la igualdad al electrónico. El Baskonia respondió de inmediato, y volvió a poner distancia con un parcial de 0-6.
El Barça contraatacó y, con una intensidad superlativa y la garra defensiva implantada por Pascual, se puso por delante en el marcador por primera vez en todo el partido a falta de cuatro minutos. El Palau enloqueció y se volcó por completo con los suyos. La alternancia en el marcador pasó a ser constante, augurando un final de infarto. Howard, por parte del Baskonia, seguía imparable.
A falta de un minuto, el marcador volvía a las tablas: 94-94. Willy anotó un tiro libre y, con 23 segundos en el reloj, el Barça se puso uno arriba y con posesión del balón. Tras una falta en el intento de robo, Laprovittola convirtió sus dos tiros libres, poniendo al Barça tres arriba con 21 segundos por jugar. Sin embargo, Howard necesitó apenas dos segundos para anotar un triple muy punteado y volver a empatar el partido. En la última jugada, Laprovittola se la jugó y falló, llevando el partido a la prórroga.

Prórroga
Tras un último cuarto de auténtica locura, tocaban cinco minutos extra para intentar resolver un partido absolutamente épico. La alternancia en el marcador se convirtió en una constante. Laprovittola y Punter lo intentaron con triples para decantar el partido, pero ambos fallaron, y el choque se encaminó hacia una segunda prórroga.
El Palau respondió, y el ambiente simplemente era espectacular. El Baskonia salió mejor a este segundo ‘extra-time’, el Barça erró muchos tiros y a falta de dos minutos y treinta segundos el Barça se encontraba nueve puntos abajo. Hacia falta un milagro.
Los jugadores culés se dejaron la piel y apareció ese milagro llamado Punter. Con un triple espectacular, acercó al Barça a solo dos puntos y, acto seguido, completamente solo, anotó otra canasta sensacional para igualar el partido. El Baskonia respondió con un 2+1 de Howard. Sin posesión, el Barça buscó la falta, provocó tiros libres, el rival falló uno, Parra recogió el rebote y Punter, de nuevo, se inventó un basket increíble que forzó la tercera prórroga.
Tras más de 50 minutos de intenso choque, el Barça afrontaba cinco minutos más de juego con la esperanza de que esta vez sí fueran los últimos. La cosa empezó de la mejor manera, con un parcial de 12-0 a favor del Barça, que veía la victoria más cerca que nunca. Todo el acierto que había tenido el Baskonia a lo largo del partido pareció desvanecerse ante una defensa culé que mostró su mejor versión. Así culminó el que puede considerarse el mejor partido de la temporada, con un marcador descomunal de 134-124 y Kevin Punter brillando con 43 puntos y 49 de valoración. Una noche simplemente histórica.

Deja un comentario