Primer enfrentamiento entre el FC Barcelona y el OH Leuven en Europa. Las azulgranas reciben este miércoles, a las 18:45h, al conjunto belga.
El Estadi Johan Cruyff se viste de gala para una nueva noche europea con un enfrentamiento inédito: el FC Barcelona Femení recibe por primera vez al OH Leuven en la tercera jornada de la fase de grupos de la UEFA Women’s Champions League.
El equipo de Pere Romeu llega en un gran momento de forma en competición europea. El Barça suma dos victorias en dos partidos, el contundente 7-1 ante el Bayern y el solvente 0-4 en Roma, que refuerzan la idea de que las azulgranas quieren marcar territorio desde el inicio de la competición. A pesar de la gran solidez mostrada, el mensaje de Pere Romeu para este partido es claro: evitar la confianza excesiva y salir con todo al terreno de juego del Johan Cruyff.
Enfrente estará un Leuven que vive un momento especial. Es su primera participación en una fase de élite de la Champions y la está afrontando con muy buen rendimiento. Las belgas ya han sumado cuatro puntos, con un valioso empate en París y una victoria en casa frente al Twente. No parten como favoritas, pero precisamente eso las convierte en un rival peligroso.
Rotaciones en el once inicial
La buena noticia para Pere Romeu es la vuelta de Ewa Pajor, que ya disputó minutos en el último partido de liga y está preparada para jugar también en este encuentro europeo. En cambio, Salma Paralluelo y Patri Guijarro continúan de baja por lesión. Poco a poco, el conjunto azulgrana va recuperando efectivos, algo clave para mantener el ritmo competitivo. Lo más probable es que haya rotaciones, ya que el Barça afronta tres partidos en nueve días, una carga exigente para las jugadoras.
Cualquier error o exceso de confianza puede pasar factura, y eso no entra en los planes del técnico. Mantener la dinámica positiva es esencial para el conjunto azulgrana, que busca sumar otros tres puntos que le mantengan en lo más alto de la clasificación. En el nuevo formato, cada punto es crucial para asegurar el acceso directo a los cuartos de final.
Una victoria dejaría al Barça en una posición muy cómoda de cara al liderato del grupo; para el Leuven, puntuar en Barcelona sería un logro histórico y un impulso anímico enorme para seguir soñando.
Sobre el césped, la diferencia de experiencia y calidad debería inclinar la balanza hacia el lado blaugrana, pero cualquier escenario es posible. El Leuven quiere demostrar que ha llegado a Europa para competir y saldrá con todo.
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