De suplente con dudas a titular indiscutible en la selección: el renacer de una futbolista que decidió apostar por ella misma.
Claudia Pina vive su momento más dulce. La delantera de Montcada i Reixac, con apenas 23 años, ha demostrado que la perseverancia aún tiene hueco en el fútbol moderno.
«En el Barça somos todas muy buenas y es un entrenador quien decide quién juega […]. Si no me llegan a dar la oportunidad igual me hubiera planteado cosas para el futuro», reconoce.
Lejos de rendirse, se volcó en su preparación fuera del club. «Me lo curré en verano. Trabajé con un nutricionista, preparador físico y psicólogo, y me ayudó», confiesa la jugadora azulgrana.
Un hueco ganado a base de esfuerzo
Con Salma Paralluelo, Fridolina Rolfö y Kika Nazareth como competencia directa, muchos habrían optado por buscar minutos lejos del club.
«Decidí tener paciencia y seguir en el club de mi vida. Por suerte este año he empezado a jugar más», afirma. Además, la salida de Mariona Caldentey al Arsenal liberó espacio en la delantera y Pina la ocupó con goles: 24 en la temporada, muchos en partidos decisivos como el doblete ante el Atlético de Madrid en la Copa de la Reina o frente al Chelsea en semifinales de Champions.
De vuelta con España
Por otro lado, su rendimiento no pasó desapercibido y Montse Tomé volvió a contar con ella. «Me siento a gusto, feliz y con ganas de aportar el máximo», asegura.
En esta Eurocopa ha jugado todos los partidos de la fase de grupos, ha marcado un tanto ante Bélgica y se prepara para jugar este viernes los cuartos contra las suizas: «Tenemos en la cabeza a Suiza. Nunca hemos superado los cuartos y es un reto para nosotras». Asimismo, admite admiración por su rival.
«El medio del campo me gusta mucho, con tres jugadoras que se complementan muy bien y creo que puede ser una de sus fortalezas. También la calidad de Sydney arriba que podría ser decisiva porque tiene mucha calidad».
Una generación impaciente
En un contexto donde prima la urgencia, Pina desafía estereotipos. Ha vuelto a marcar con la selección, que ya suma ocho goles en doce partidos y sueña en grande.
«Lo que se dice fuera no estoy muy atenta. Igual, en estos partidos he estado metiendo más goles, pero eso no significa que todo dependa de mí. Llevamos muchos goles en esta Eurocopa. Mi objetivo es ayudar en el campo al máximo, sea como sea», dice ajena al ruido exterior.
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