Ferran Torres, un destino lejos del Barça
El futuro del ex Valencia y Manchester City, que no acaba de rendir con números verdes en el cuadro catalán, parece estar cada vez más lejos de Barcelona.
En el mes de diciembre de 2021, el Camp Nou recibía con expectación el fichaje de Ferran Torres, por entonces jugador en ascenso y educado bajo las sofisticadas maneras de Pep Guardiola en el Manchester City. En aquél tiempo la afición culé vivía momentos difíciles, al igual que el club, en plena transición y repensando el incierto porvenir tras la salida de Lionel Messi pocos meses atrás. En este contexto, el aterrizaje de Ferran Torres se erigía como la primera gran apuesta por reencauzar el destino, sangre joven, prometedor y asociativo, que permitía al aficionado azulgrana recordar al menos en parte a la época donde la delantera incluía piezas de renombre como David Villa y Pedro Rodríguez.
Hoy, sin embargo, esa apuesta de 55M de euros pactados a plazos con la entidad "citizen" por el polivalente extremo, parece estar llegando a su fin. Luego de su más que discreta campaña 2022/23, el ex internacional español (recordemos que, por ahora, no forma parte de las convocatorias del seleccionador Luis De La Fuente) ha entrado en un bucle, aparentemente, sin salida. Según el propio Ferran, sus molestias en el pie habrían sido parte de las razones de sus horas más bajas. No obstante, se sabe también de sus intentos por reanimar su alicaído estado mental, socavado por las presiones intrínsecas del Camp Nou, su precio de transferencia y la necesidad de ser ese delantero que sumara alegrías en las primeras etapas de la sombría era post Messi.
La realidad hoy es que su destino parece estar cada vez más lejos del FC Barcelona, pese a la negativa del jugador, siempre que pueda encontrarse alguna salida interesada en su ficha. La dirección deportiva y el cuerpo técnico no acaban de estar convencidos de sus prestaciones, y ante las necesidades de la plantilla por overbooking de jugadores, en adición a las restricciones del fair play financiero y masa salarial, desde el club se piensa que su marcha sería inminente, en forma de venta -la opción más deseada- o una cesión con opción de compra, que permita liberar su salario y de algún modo comprometer su transacción el siguiente año.
El lastre adicional en el caso del ex canterano del Valencia, lo supone al hecho de que aún se está amortizando su pago con el Manchester City, por lo que una transferencia debería ser lo suficientemente alta como para compensar en términos económicos y contables su adquisición, escenario en gran medida utópico al presente desde algún club grande mirando su bajo rendimiento y pérdida de valor.
Pese a ello, en las últimas horas parece surgir alguna esperanza en "Can Barça". De acuerdo a algunas fuentes, el Villarreal estaría presuntamente buscando un jugador de corte ofensivo para suplir la posible partida de Samuel Chukwueze, pretendido desde Italia.
¿Será factible convencer al jugador y alcanzar un acuerdo con el cuadro amarillo, al menos en forma de cesión? ¿surgirá algún otro equipo interesado, desde Inglaterra? Todo quedará pendiente de definirse en los próximos días o semanas, hasta el 31 de agosto, a la espera de alguna solución que permita al Barça acometer sus planes financieros y deportivos, así como para un jugador cuya carrera aún puede remontar aunque sea lejos de la ciudad condal.
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