El Barça Atlètic se deja dos puntos en el Anxo Carro
Un solitario tanto de Pau Víctor le vale al conjunto de Rafa Márquez para sumar un punto en un partido donde merecieron ganar. Con esto, permanecen una jornada más en la quinta posición.
El encuentro empezaba cuesta arriba para los blaugranas, ya que en el minuto 11 Nacho Quintana adelantaba al Lugo con un remate cruzado. Aunque al cabo de cuatro minutos el Barça Atlètic ponía las tablas en el luminoso. Un chut de Aleix Garrido desde la frontal del área y un posterior rebote en el cuerpo de Pau Víctor desviaba imposible para el guardametaTabuaço.
Desde ese momento, los visitantes presionaron con más intensidad y en vistas que no conseguían el 1-2, bajaron el ritmo y monopolizaron el duelo. No obstante, las ocasiones eran equitativas. Mientras los catalanes merodeaban en campo rival, los gallegos aguardaban en vísperas de salir al contraataque. De hecho, el desborde por bandas y la amenaza constante de Willy Ledesma provocaron que los de Rafa Márquez atacasen con mucha cautela.
Así las cosas, las aproximaciones más peligrosas fueron los centros repelidos por parte de la defensa local y un zapatazo de Alarcón desde la distancia. Aparte de los desmarques en ruptura del propio Willy.
Una vez en los segundos 45 minutos, el nueve albivermello probó fortuna con una volea, pero esta no era su tarde. Los de Pedro Munitis con muy poco generaban mucho. Por ejemplo, un saque de banda en tres cuartos de cancha y una prolongación de espaldas, permitía a Jozabed plantarse mano a mano con Marc Vidal.
Conscientes de ello, los culés no adelantaron tanto las líneas. De ahí que no se viesen las mejores versiones de Aleix Garrido, Moha o Casadó, futbolistas clave para filtrar el último pase. Faye, muy expeditivo a lo largo del partido, probó un trallazo que el arquero repelió a córner.
En busca de dinamismo, Márquez dio entrada a Bernal, el Pocho y Unai. Este último generó mucho desborde. En una recepción de espaldas, el badalonés se zafó de su marca con un control orientado a modo de recorte y asistió a Alarcón. El de Castelldefels chutó de primeras, pero Tabuaço paró. En el rebote, un Pau Víctor libre de marca también lo intentó, pero con más de medio equipo en su área era complicadísimo ver puerta. Asimismo, el recién incorporado Antonetti casi adelanta a los suyos con un remate de cabeza desde el área pequeña.
En la recta final, Pau Víctor sacó bajo palos lo que hubiese supuesto el 2-1. En efecto, dado que no le llegaban balones, el de Sant Cugat se puso el mono de trabajo para ayudar en tareas defensivas.
Ya en el añadido, la experiencia premió a los lucenses, pues en un balón dividido Héctor Fort levantó la pierna y Antoñín simuló que le golpeó en el rostro. Como resultado, el árbitro lo interpretó como falta y se dio por finalizada la contienda.
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