¿Cómo han sentado las palabras de Gündogan al Staff del Barça?

Se entiende como un mensaje positivo para el equipo tras perder un Clásico y entendiéndolo como el de un jugador competitivo y ganador.

Las palabras de Ilkay Gündogan tras el Clásico han generado mucho debate en el barcelonismo. El alemán mostró un tono muy autocrítico al decir que esperaba una reacción de más enfado e incluso de ira de su equipo por la derrota y por cómo se produjo, en el descuento. El centrocampista no se mordió la lengua en la zona mixta: "Vengo del vestuario y obviamente la gente está decepcionada después de un partido tan grande, tan importante y de un resultado tan innecesario. Me gustaría ver más enfado, más decepción. Esto es parte del problema". Pidió que la plantilla sea más impulsiva ante la adversidad: "Tienen que expresar más emociones cuando pierdes y cuando sabes que puedes jugar mejor. Hay que hacerlo mejor en ciertas situaciones y no reaccionamos".

Esas palabras no han sentado mal ni en el cuerpo técnico ni en el área deportiva. En el área deportiva quieren validar lo dicho por el centrocampista alemán, entrenado por Pep Guardiola, campeón de Europa, porque se entiende como algo normal en un tipo ganador que dejó un equipo muy potente para ayudar al Barcelona.

Hay que ver como este mensaje ha sido recibido por el vestuario. Si Gündogan dijo lo que dijo fue porque cuando salió de la ducha vio algo que no le encajó con su mentalidad competitiva.

No sería la primera vez que unas declaraciones en zona mixta de alguien del equipo van en dirección a dentro del Vestuario. En el 2015, después de la derrota en Aneota, Iniesta hizo unas declaraciones que tuvieron mucho revuelo dentro del vestuario, provocando unión en el vestuario y acabando la temporada con un triplete histórico.