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Arrollan al Barça Atlètic en Salamanca

Unionistas le endosa un 4-1 a los culés y rompen con su racha de doce partidos consecutivos sin perder.

El filial azulgrana cae en el Estadio Reina Sofía por 4-1 y se descuelga de la lucha por el ascenso directo. Los pupilos de Rafa Márquez acusaron las bajas por estar con el primer equipo y realizaron la peor primera parte de la temporada, encajando tres goles evitables.


El comienzo del encuentro nos mostró una versión mediocre del Barça Atlètic, ya que conscientes del mal estado del césped, encadenaron posesiones estériles y deficientes una vez en campo contrario. Además, la debilidad defensiva de los visitantes fue determinante. Aunque ya avisaron los salmantinos haciendo intervenir al debutante cancerbero Diego Kochen, continuaron encadenando ataques sin réplica barcelonista alguna. De hecho, en el minuto 9 Slavy estrenó el marcador y el estadio estalló de euforia. Esto es debido a que en el supuesto 4-3-3 implantado por Rafa Márquez, en ataque se convertía en un 3-4-3. Porque Moha (hoy lateral derecho) acudía a su posición natural, es decir, mediocampista. Entonces, en una transición el marroquí llegó tarde a cubrir a su marca y condicionado por estar amonestado permitió que Álvaro Gómez asistiese ganándole la espalda.


Luego, una intervención meritoria del Kochen bajo palos desviando a córner fue el preludio del segundo tanto de Slavy. En esta ocasión Jon Rojo la colgó al corazón del área y el húngaro volvía a ver puerta peinando el esférico con la testa. Y pudo hacer hat-trick en el 34', ya que remató libre de marca, pero está vez el balón se fue alto. Cuando los visitantes intentaban ralentizar el juego para evitar una mayor sangría antes del paso por vestuarios, los de Dani Ponz fueron más listos y se lanzaron al ataque en el añadido. Momento en el que Losada hizo el tercer gol de la tarde.


Sin lugar a dudas, el cuadro visitante cuajó la peor primera parte de la temporada. Tanto es así, que aparte de la falta de contundencia en defensa, el primer disparo a puerta llegó pasados los cuarenta y cinco minutos reglamentarios en un intento de Unai Hernández en jugada individual.



En la segunda mitad, el Barça Atlètic salió enchufado y decidido a darle la vuelta al resultado. Sobre todo, los futbolistas ganaron más duelos individuales y el esférico se movía con mayor fluidez. Sin embargo, la pasividad defensiva todavía era latente. Prueba de ello, la cabalgada de Álvaro Gómez desde campo propio hasta que Mbacke le robó la cartera cuando ya estaba dispuesto a finalizar. La defensa salmantina era infranqueable (solo habían encajado ocho tantos de local), así que el conjunto azulgrana probó suerte con tiros desde larga distancia y centros laterales. Percan, que entró desde el banquillo, vio puerta al más puro estilo de un cazagoles. Robó un balón en el área y a modo de sombrero se lo orientó girando 180 grados sobre su eje para mandarlo al fondo de las mallas. Otro relevo fue el de Pelayo, pero su regreso tras lesión fue desafortunado, pues un par de cabezazos erróneos del central desencadenaron en el 4-1. Y con ello, acabaron con las posibilidades de que el equipo rascarse algún punto de su visita al Reina Sofía.


Finalmente, Trilli, también volviéndose a sentir futbolista tras estar cuatro meses en el dique seco, volvió a caer lesionado. Asimismo, agotándose el partido, la afición local, eufórica por el papel de los suyos, hizo la ola en más de una ocasión mientras se sentían los olés en la grada. En efecto, estaban bailando a todo un Barça Atlètic.

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