A Xavi Hernández no le tembló el pulso con Lewandowski
Xavi Hernández, en un inusual arrebato, transforma la dinámica del FC Barcelona durante el descanso contra el Almería.
Tras una primera mitad desastrosa, con el colista dominando y las gradas en descontento, Xavi opta por el látigo en lugar de las palabras amables. En el vestuario, entre patadas y golpes, acusa a su equipo de falta de alma y ambición, rompiendo incluso su propio jersey. Lewandowski es blanco de sus críticas: "¡A ver si empiezas a correr de una puñetera vez!", le reprocha.
La tensión no se detiene ahí. Xavi, decidido a sacudir a su equipo, sacrifica públicamente a Joao Félix, dejándolo fuera del partido en la segunda mitad. El portugués acepta a regañadientes, contrastando con la actitud profesional de Andreas Christensen, quien asume el cambio con resignación. La reacción del equipo en la segunda parte valida la eficacia de la bronca de Xavi, siendo sus quince minutos más tensos y fructíferos al mando del FC Barcelona.
El polaco no fue el único jugador al que Xavi se dirigió con unas formas algo duras. El técnico de Terrassa mandó un mensaje muy claro al equipo: "Quiero que corráis como cerdos".
El conjunto azulgrana reacciono en la segunda mitad del encuentro ante el Almería y logro vencer finalmente el partido.
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