La temporada azulgrana termina en el Martín Carpena con sabor amargo tras un partidazo igualado hasta el último segundo.
Un final cruel para un partido vibrante
El Barça cayó eliminado en el tercer y definitivo partido de los cuartos de final de la Liga Endesa tras perder ante Unicaja en el Martín Carpena por un ajustado 97-95. Los azulgranas se despiden de una temporada en blanco que ha estado marcada por muchos altibajos.
El encuentro fue un auténtico thriller, lleno de intensidad, alternativas y emoción, que se decidió en el último segundo con un tapón espectacular de Kam Taylor sobre el intento de triple de Satoransky. El conjunto azulgrana ofreció una imagen muy distinta a la del segundo partido en el Palau. Esta vez sí compitió, jugó con carácter y llegó con opciones claras de ganar, pero no logró rematar la faena en los momentos decisivos. Una derrota dolorosa, más aún por las formas, que cierra una temporada irregular marcada por la falta de continuidad.
Primera parte eléctrica e igualada
Desde el salto inicial, el partido se jugó a un ritmo altísimo. El Barça entró bien en el encuentro, con un Willy Hernangómez dominador en el poste bajo y un Darío Brizuela muy activo. Sin embargo, Unicaja respondió con acierto desde el perímetro, especialmente gracias a Tyson Carter y David Kravish.
La igualdad fue constante durante toda la primera mitad. El Barça encontró fluidez ofensiva con un gran Kevin Punter, que ya sumaba 13 puntos al descanso, y un sólido trabajo de equipo en defensa. No obstante, los de Ibon Navarro supieron aprovechar cada mínimo desajuste defensivo culé y lograron llegar al intermedio con ventaja mínima (43-42).
Intercambio de golpes
La segunda parte mantuvo el tono vibrante. Ninguno de los dos equipos lograba escaparse en el marcador. Jabari Parker apareció en momentos clave con varios tiros de media distancia, mientras que Joel Parra fue un baluarte en defensa.
El Barça mantuvo el tipo a base de oficio y talento individual. Un mate espectacular de Anderson, un triple de Abrines y los puntos de Brizuela mantuvieron la igualdad (79-79) a falta de cinco minutos. En el tramo final, Unicaja puso un parcial de 9-0 para forzar la prórroga. El desenlace iba a ser dramático.
Un desenlace agónico
Unicaja pareció tomar la iniciativa de la prórroga, pero el Barça no se rindió. Dos 3+1 de Punter pusieron al Barça dos arriba (92-94) y el mismo Punter, desde el tiro libre igualó el partido (95-95) a falta de 19 segundos. Todo se decidiría en una última jugada.
Kravish, tras rebote ofensivo, anotó a falta de 6 segundos para colocar el 97-95. En la última posesión, el balón fue para Satoransky, quien buscó el triple ganador desde la esquina. Pero ahí apareció Kam Taylor, que voló para taponar el tiro y desatar la locura en Málaga. El Barça, eliminado. Un final cruel.
Final de curso con preguntas
El Barça cierra así una temporada sin títulos y con muchas dudas de cara al futuro. El proyecto de Joan Peñarroya mostró momentos brillantes pero también lagunas preocupantes en los momentos clave. A nivel individual, nombres como Punter, Parker o Parra han dejado destellos, pero el equipo no logró consolidarse como un bloque sólido.
Ahora toca reflexión. La planificación del próximo curso será clave para volver a pelear por todo. La afición, que ha acompañado en los buenos y malos momentos, merece un Barça competitivo. El objetivo sigue siendo el mismo: volver a la élite. Pero la reconstrucción parece inevitable.
Ficha técnica:
97 – Unicaja (24+19+12+29+13): Ejim (8), Barreiro (-), Carter (8), Kravish (6) y Perry (16) -cinco inicial- Pérez (11), Balcerowski (7), Kalinoski (8), Díaz (10), Djedovic (5), Osetkowski (2), Taylor (16)
95 – Barça (18+24+22+20+11): Punter (37), Satoransky (4), Parker (8), Anderson (13) y Hernangómez (6) -cinco inicial- Parra (3), Villar (-), Abrines (13), Fall (6), Brizuela (5)
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